El técnico desmiente que el equipo coruñés juegue mejor fuera de casa: La Liga 2 es muy complicada y nos enfrentamos al segundo mejor equipo visitante.

En sus primeras declaraciones tras el encuentro, Óscar Gilsanz reconoció que el empate fue justo. “Cuando encajas un gol al final siempre te queda un sabor amargo. En el fútbol sabemos que los cambios pueden darse hasta el último minuto. Pero el esfuerzo del rival merecía ese premio. El guión del partido no era el que queríamos. La situación que pretendíamos con la superioridad de Mario Soriano en el centro del campo duró sólo 15 o 20 minutos. El Zaragoza nos desgastó y vivimos al límite”, afirmó el técnico, que aún no ha visto perder a su equipo en Riazor, pero también ha sido testigo de una única victoria. Desde que se hizo cargo del primer equipo, su balance es de tres victorias, dos empates y dos derrotas, incluida la del pasado miércoles en Copa.

A pesar de reconocer en varias ocasiones las dificultades del Deportivo en casa, donde está entre los peores de La Liga 2 con sólo 10 puntos de 27 posibles, el Deportivo aún no ha rectificado la situación. “No hay ninguna psicosis por jugar en Riazor. Ya he dicho que si me dieran a elegir, siempre jugaría en Riazor, porque tenemos una afición que nos apoya hasta el final”, insistió Gilsanz. Bajo su liderazgo, el Dépor logró derrotar al Eibar en casa, pero sólo pudo empatar ante el Sporting y, más recientemente, ante el Zaragoza.

Gilsanz admitió que cometió errores en el plan de juego. “Queríamos defender más lejos de nuestra portería, y también nos faltó algo de compostura para mantener la posesión y generar más circulación de balón. Tuvimos algunos contragolpes claros, pero no fuimos capaces de ser efectivos. La Liga 2 es muy compleja, y nos enfrentamos al segundo mejor equipo fuera de casa”, recordó, reconociendo que al equipo le faltó efectividad en la segunda parte. “El Zaragoza nos fue desbordando cada vez más en nuestra área y nosotros intentamos cerrar el partido al contragolpe, pero no lo conseguimos.

Si ese gol hubiera sido a nuestro favor, seguramente el partido se hubiera inclinado a nuestro favor. Hicimos un esfuerzo defensivo en nuestra área, pero el rival tenía mucha fuerza para esos centros laterales”, afirmó el técnico del Deportivo, que evitó responder si echó de menos a David Mella, baja por sanción. Es cierto que cuanto más gente tienes cerca del balón, menos jugadores tienes para conseguir profundidad, pero es una situación en la que tenemos que seguir trabajando. Al principio teníamos buenas sensaciones con el balón, pero nos faltó profundidad, reconoció Gilsanz.

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